Washington, 1 abr (Prensa Latina) El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio hoy la bienvenida a la Casa Blanca a miles de personas, la mayoría niños, que participaron en una tradicional celebración que tiene más de 140 años.
Desde el balcón que da al Jardín Sur de la mansión ejecutiva, el mandatario, acompañado de su esposa Jill, emitió su mensaje de esperanza, aunque no sobraron colegas que notaron que, a esa misma hora, en Gaza, las familias están rotas, los niños quedan huérfanos o mueren bajo el fuego de Israel.
Biden, quien buscará la reelección el 5 de noviembre venidero, dijo en su alocución que nunca ha sido más optimista sobre Estados Unidos, mientras Jill -maestra de profesión- se refirió al poder de la educación, justo el tema al que se dedicó el festejo de este año.
Por eso las palabras ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas estaban inscritas en grandes globos aerostáticos de colores que engalanaron el lugar. Biden y Jill compartieron con los niños.
Pese a la lluvia y el mal tiempo en la capital del país, se estima que unas 40 mil personas visitarán este lunes la Casa Blanca hasta las 19:00, hora local, en que concluye la maratónica jornada.
La tradición de las carreras de huevos en la Casa Blanca data de 1878 y ha resistido las divisiones políticas. Los niños son los principales protagonistas.
Desde entonces, los presidentes de turno y sus familias abren las puertas de la residencia oficial cada año el Lunes de Pascua.
Este es uno de los eventos anuales más antiguos en la historia de la mansión, ubicada en el 1600 de la avenida Pensilvania.
Según la Junta Estadounidense de Huevos, al menos 64 mil se destinaron para la ocasión.